Caracas. Más de uno que observe o escuche a Jenethzareth McTurk en algún lugar de Venezuela pudiera creer que «La Barbie del Llanito» no es una atleta que irrumpió con fuerza en las artes marciales mixtas, con un comienzo trepidante marcado por sus poderosas patadas e impecable técnica al momento de subirse en un octágono.
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McTurk, de 21 años de edad, quien también es estudiante del sexto semestre de Comunicación Social en la Universidad Monteavila, tiene casi toda su vida practicando Kenpo karate, basado en la combinación de antiguas técnicas de pelea y principios científicos modernos, especialidad en la que ascendió a cinturón negro cuando tenía apenas 15 años.
Entrenada desde sus inicios por una leyenda de las artes marciales, Juan García «El Apache», quien fue 10 veces campeón mundial de combate en torneos abiertos, con numerosos títulos internacionales.
En una entrevista concedida a El Cooperante, McTurk demostró que está consciente que su trayectoria en uno de los deportes más duros está comenzando, pero sabe que con trabajo, talento, disciplina, salud y madurez puede cumplir sus objetivos, que hasta los momentos parecen estar encaminados a trascender más allá del país.
¿A qué edad y cómo comenzaste a practicar artes marciales?
– Bueno, comencé cerca de los cinco años de edad en la escuela de Kenpo karate del maestro Juan García «El Apache», en El Llanito, cerca de mi casa, comencé ahí porque mi hermano ya tenía rato entrenando y me gustaba verlo.
¿Siempre destacaste en los torneos infantiles y juveniles abiertos?
– Sí, me iba muy bien, desde pequeña siempre estaba en el podium, me destaqué en formas y en combate, me gustaba hacer armas y defensa, pero nunca lo llegué a desarrollar en competencias.
¿Algún evento internacional?
– Sí, el primero fue en Argentina en 2010, en un torneo internacional en el que resulté campeona en formas y fui segunda en combate, luego ese mismo año fui a México donde gané dos segundos y un tercero porque competí en algo que se llamaba cuartetas, y bueno nada, participé y me llevé segundo lugar. También hace un año fui a México otra vez y quedé segunda en el torneo «La Noche de Las Estrellas».
Actualmente estás destacando dentro del mundo de las artes marciales mixtas. ¿Ya abandonaste por completo el kenpo?
– No, trato de mantenerlo equilibrado, cuando tengo compromisos más cercanos de MMA me enfoco solo en eso, cuando tengo uno de karate, me dedico a ello, me voy administrando. Pertenezco a un equipo internacional que me patrocina, se llama el Star Team, entonces tengo todavía ese compromiso dentro del point fight que no puedo dejarlo.
¿Por qué decidiste incursionar en las artes marciales mixtas?
– Hace año y medio me escribió la gente de mi gimnasio actual, que es Xpartan Fit Zone, me dijeron que ellos tenían la idea de organizar un equipo de atletas pro y amateur, pero con personas que ya tuvieran rango avanzado dentro de un arte marcial, bien sea boxeo, jiu jitsu, karate, el que fuera, entonces me gustó la idea, yo fui con mi maestro al gimnasio, ví las instalaciones, leí el contrato, me gustó y fue la oportunidad de hacer algo diferente, de hecho a varios de mi gimnasio se les dio la oportunidad y no quisieron porque no a todos les gusta el deporte de alto contacto, pero yo tomé la oportunidad y aquí estoy.
Ya entrando en lo que fue tu último combate. ¿Cuál fue el plan de pelea que hiciste en función de tu rival?
– Yo sabía que la muchacha venía de practicar una especie de kung fu, pero también es campeona de kickboxing, nos habíamos mentalizado en que iba a buscar el derribo, que iba a buscar agarrarme una pierna, porque lo que se vio en mi pelea anterior era que yo soy pateadora y ‘había que llevarla al piso para resolver’.
Entonces básicamente la estrategia era lo que yo hice en la pelea, patada, golpe y cerrar con patada, también queríamos aprovechar el tema del ground and pound (golpeo en el suelo) porque es algo que llama mucho la atención y quería demostrar que tenía varias herramientas más allá de las patadas, gracias a Dios se me dio y terminó la pelea en ground and pound por nocaut técnico.
¿Hasta dónde quieres llegar en las artes marciales mixtas?
Creo que como todo peleador, llegar a ligas internacionales de alto nivel como UFC, ahora está la Liga Lux en México en la que hay una peleadora venezolana, Daniela Villasmil quien peleó recientemente por el título, así que lo más probable es que comience primero por esa liga a nivel internacional y ya luego si puedo llegar a la UFC sería excelente, pero sí planeo seguir en esto, quizás llegue un punto en el que no pueda hacer las dos cosas por temas de contrato, por más que sea el karate también implica golpeo, pelea, no me puedo lesionar, no puedo entrenar en otras escuelas que no sea en las aceptadas por mi gimnasio, entonces seguramente habrá un punto en el que diga, mira, me quedo solo con las MMA, pero por ahora seguiré haciendo ambas.
¿Por qué Lux y no alguna otra empresa?
– Lux porque es la que nos queda más cercana, no hay tema de problema con la VISA, está ahí en México y tenemos varios conocidos que ya están dentro de esa liga, entonces lo que queremos es que yo me foguee bien, que haga una base de un récord, ponte que sea 5-0 o 6-0 para ya luego sí subir y tener un currículum más sólido.
La otra opción sería Karate Combat, que es otra empresa que está sonando ahora mucho, ahí está compitiendo la venezolana Omaira Molina y entró también Andrés Madera, entonces están esas dos opciones, sin embargo tendría que hablarlo con mi entrenador.
¿Cómo te sentiste en tu última pelea y en la de tu debut, estuviste nerviosa o presionada?
– En la primera estuve nerviosa porque era primera vez que entraba en un octágono, en una jaula, es totalmente diferente porque cuando se cierra esa jaula no puedes salir, no puedes pedir tiempo, es hasta que se acabe, en la primera yo fui la única pelea femenina, la única amateur, la pelea que estaba abriendo ese evento, era la única mujer que estaba representando a mi gimnasio, entonces sentía esa presión, en esta ya estaba mucho más relajada, pero siento que los nervios no son algo que me afecten, porque me siento segura con mis entrenamientos y siempre lo que sale en la pelea es lo que se practica en los entrenamientos y eso ha quedado demostrado en estas dos peleas que he tenido.
¿Algún artista marcial o peleador de la UFC que admires o que tengas como ídolo?
– Bueno, actualmente a Valentina Shevchenko, más que todo por su estilo de pelea, ella también es pateadora, tiene buen grappling, tiene buena distancia, entonces me gusta ver sus peleas porque mientras tú mantengas tu técnica, un estilo marcial dentro de la jaula vas a ser más reconocido, a nadie le importa un peleador que pelea a lo loco como si estuviese peleando en la calle, entonces lo que queremos mantener es esa línea de karate, que digan que ella sabe esto, mira cómo sube la rodilla y cosas básicas, no una peleadora más sino que resalte porque tengo técnica, porque en la MMA todo es un negocio, tienes que saberte vender, saber qué es lo que le gusta o no a la gente y en base a tu experiencia, a lo que quieras hacer dentro de la jaula lo vas haciendo y lo vas vendiendo para hacerte más conocida. Es un espectáculo pero está en riesgo tu integridad física, no porque sea un espectáculo puedes ponerte a inventar.
¿En qué consiste tu entrenamiento diario o cuánto tiempo entrenas durante la semana?
– Mi entrenamiento diario es de cuatro a seis horas diarias de lunes a viernes, yo voy a mi centro de entrenamiento que es Xpartan Fit Zone, allá hago lo que son los heat, siempre hago dos heats cuando estoy en campamento, eso son una hora u hora y media, luego como siempre tengo que cortar peso hago lo que es spinning como 45 minutos o una hora, depende de qué tan cerca esté de dar el peso, tengo clases de boxeo, todos los días hago entre una y dos horas con mi entrenador, que es con quien defino la estrategia de mis peleas.
¿Por qué eres la Barbie?
– (Risas) Porque fue algo que en el pesaje anterior (…), yo en los pesajes suelo irme arreglada, me maquillo, me arreglo el cabello, me lo dejo suelto, entonces siempre como que resalto entre las otras peleadoras que no suelen hacer eso, que solo van, hacen su careo y ya, pero yo no pues, porque mi personalidad es así: me gusta siempre estar arreglada, no porque yo haga artes marciales mixtas ando solo en shores deportivos y ya.
A mí siempre me preguntan que porqué escogí las artes marciales y no algo más femenino, pero sabes, yo mido como 1.60, me faltan como 10 centímetros para ser modelo, pero me gusta el maquillaje y lo puedo aplicar en esto.
Ese día me maquillo, me peino, me arreglo, me toman fotos, me ven en televisión, los careos los transmiten, así que si tengo esa oportunidad lo voy a hacer bien, es decir, que salga bien, que esté arreglada, también siempre me dicen que parece que no peleo, que uso lentes, es lo que la gente siempre cree, que ‘ay, pareces una muñequita, pareces una barbie‘, entonces bueno, así se quedó, de aquí en adelante seré la barbie pues.
¿Esas trenzas rojas en tu último combate forma parte de esa personalidad característica de la que hablas?
– Sí, porque me había gustado, lo había visto antes pero en fotos, no lo había visto en UFC ni nada, pero me parece cool por el hecho de que primero combina con mi equipo, la gente de mi gimnasio, combina con el uniforme y era como algo que se veía de lejos, en televisión, en todos lados, era algo llamativo y que eso gustó a la larga porque nadie se lo espera, puedes hacer show y por eso mucha gente va, mucha gente del evento pasado me dijo que vino a verme porque me habían visto en la televisión o en el evento anterior, en la Liga Xpartana número dos, entonces es chévere, porque ya la gente como que me conoce, sabe quién soy, no es solo como que dí el espectáculo de la niña bonita y me matan en el ring sino que también sé pelear, sé hacer las cosas bien dentro del octágono y como que equilibro la cosa.